Simulacro de accidente aéreo
Siete ambulancias, dos autobombas, médicos, enfermeros, personal de Defensa Civil, policías aeroportuarios y un grupo de actores protagonizaron el simulacro de rescate ante un eventual accidente aéreo.
La simulación de un accidente aéreo con víctimas fatales en el aeródromo santarroseño, alertó a los vecinos que vieron pasar a alta velocidad a varias ambulancias y un par de autobombas. Se trató de una práctica programada en la que intervinieron equipos de emergencia y un grupo de actores. Para representar el avión despistado, se prendió fuego un viejo colectivo.
El simulacro comenzó a las 13.00 con el toque de alarma de accidente aéreo en la cabecera norte de la pista. Según explicó a LA ARENA el jefe del aeropuerto, vicecomodoro Rodolfo Defeo, se pensó en una aeronave de mediano porte, biturbohélice, que se quedó sin uno de sus motores a 10 minutos de aterrizar. El aterrizaje derivó en el despiste de la aeronave y el incendio posterior. De las nueve personas abordo, dos habrían fallecido en el acto y el resto sufrido heridas muy graves, con riesgo de perder la vida al quedar atrapados entre los hierros y las llamas.
Para simular el accidente, se utilizó un viejo colectivo que se colocó a unos metros de la pista y se prendió fuego en todo su entorno. Para representar a los tripulantes de la aeronave, como así también a los familiares y pasajeros que esperaban en el hall del aeropuerto, se recurrió al grupo de teatro La Escalera. Los jóvenes manchados en todo su cuerpo con pintura roja, le dieron el toque llamativo al operativo.
Profesionalismo.
"Entre 1 y 10, le pondría un 9" sostuvo el vicecomodoro Defeo al calificar el desarrollo de la práctica. Defeo destacó la seriedad y responsabilidad con que actuaron todos los participantes del operativo, y en particular el personal del hospital Lucio Molas. "Estoy sorprendido por el profesionalismo con que hicieron su tarea", sostuvo.
Además del personal propio de la aeroestación, en el operativo participaron empleados del Cuerpo de Bomberos, personal y ambulancias del Sistema de Salud de la provincia, policías y agentes de tránsito, personal de Defensa Civil, y los actores.
Aunque las autoridades aeroportuarias trataron de darle un perfil bajo al operativo, la misma magnitud de la maniobra desbarató esa intención. Fueron las ambulancias las que pusieron sobreaviso a la población sobre alguna situación de gravedad. Si bien una ambulancia circulando a rauda velocidad ya no sorprende a nadie, tres juntas y en la misma dirección generan una lógica curiosidad y preocupación en los vecinos. En esta redacción se recibieron en pocos minutos más de 30 llamados telefónicos, algunos para avisar la existencia del siniestro, otros para consultar qué accidente tan grave había ocurrido.
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